me encanta la incertidumbre, la considero una sensación subvaluada. hay algo en el no-saber-qué-pasará-luego que le inyecta intensidad al momento. aprendes a no tomar las cosas por sentado, a no darlo todo por hecho. he platicado con personas que prefieren la seguridad a lo incierto y me parece una posición cómoda. quien no toma riesgos nunca sabrá de qué es capaz.